Orgullo

Orgullo

1.

El orgullo es una voz interior que te susurra y algunas veces te grita que estás haciendo algo bueno. Es un cosquilleo interior que te dice que lograste algo por lo que te sientes feliz, con sobradas razones por la satisfacción de la misión bien cumplida. Cuando llega a tu puerta no llega solo, lo acompaña el esfuerzo, la lucha y la perseverancia

Es   motivo de inspiración para alcanzar metas sublimes. Es la pasión para lograr lo que siempre soñaste y   anhelaste.  Ser extraordinario en un mundo ordinario.

Sentir orgullo es una sensación de aquellos que no se conforman con poco y no se cansan de buscar. De los que le declaran la guerra a la mediocridad, viven y sueñan con un mundo mejor. 

Te hace sentir alegría por los logros de los que tenemos cerca, por tu país o por tu equipo favorito

Vivir con el orgullo a flor de piel es un motivo y una razón para vivir plenamente y ser auténtico.  Es una filosofía y un concepto de vida.  Va más allá de hacer lo común y lo simplemente encomendado. Es trascender, dejar una huella y un legado. Es hacer historia.

2.

Es una emoción intima, llena de satisfacción personal. Te valoras o valoras a alguien por las metas logradas y las tareas culminadas de manera exitosa. El orgullo nos impulsa a esforzarnos y a ser tenaces. Aunque se siente al final del objetivo logrado también es el principio, porque te induce a realizar cosas con la finalidad de sentir esta emoción.

Eleva nuestra autoestima y aunque no lo expresemos verbalmente se refleja en la cara,  se  hincha el pecho, sale por los poros, una cascada de sensaciones que recorre el cuerpo.

Vive, disfruta y construye cada momento de tu vida, y así, al llegar a la meta podrás mirar atrás y sentirte orgulloso del camino recorrido.

3.

Es esa satisfacción personal y placentera que se siente en el logro alcanzado, en la realización de aquellos sueños pensados en muchas noches de insomnio. Es una emoción positiva que conecta con nuestro pasado y cuando miramos hacia esa senda ya recorrida, nuestro pecho se agranda, el corazón palpita, nos paramos erguidos y fuertes, y de inmediato nos viene una sonrisa que nos ilumina. Todas son características corporales que nos evidencia lo positivo del Orgullo y nos recuerda el valor del esfuerzo invertido. Es una emoción que nos afianza el poder personal y nos recuerda lograr metas más retadoras, y con confianza seguir el camino para realizarlas en el futuro.

Es una emoción que nos imprime una fotografía en nuestra memoria de los logros propios y de otros,  donde siempre podemos tomarla para desarrollar fuerza interior, bienestar y poder decir con sencillas palabras “estoy orgullosa de ti”, “estoy orgullosa de mi”.

4.

Ay  Orgullo!,abrázame y quédate conmigo!.

Quiero ser feliz y quiero que me acompañes en mis luchas y en la búsqueda de mis sueños, y cuando tú hermana gemela, La Humildad, interfiera, no te hagas cómplice de mi ignorancia. 

Quiero que mi carácter no te meta en problemas y tú te aparezcas con mucho disimulo. Te quiero altivo y visible, eso sí,muy prudente y sin cometer excesos que me haga sentir pequeñito. Tú siempre irradias luz, pero a veces tu luz pudiera producirme ceguera, creyendo que me haces más visible y triunfador; todo lo contario, me podrías castigar y engendrar en mi al tirano que no poseo.  

Quiero seguir sintiéndome orgulloso por mis logros personales y que mi sentido de pertenencia crezca, cuando tú prima,La Envidia, toque a mi puerta. Y sabes otra cosa, mi autoestima te va a llamar cada vez que se sienta  triste y con ganas de claudicar. Ahí es donde te necesito, ahí es donde tú no me puedes fallar. 

Te quiero al lado mío, cuando mis sueños se cumplan y necesite compartirlos y celebrarlos con alguien de mi confianza. ¡Así que Orgullo, quédate conmigo!.